7 cosas que no debes hacer después de comer

Aunque muchas personas tienen la costumbre de salir a caminar o dormir la siesta después de comer, hay ciertas actividades que debemos evitar absolutamente para no interferir con nuestra digestión.
La mayoría de nosotros solo tenemos unos minutos de libertad después de nuestras comidas principales. Necesitamos dedicarlos a hábitos saludables que nos permitan desconectar y relajarnos.
Con el paso de los años, con el ritmo de vida que nos impone la sociedad, adquirimos malos hábitos que en nada favorecen nuestro bienestar.
Si bien a primera vista pueden parecernos totalmente inofensivos, pueden tener una influencia duradera en la aparición de síntomas molestos, o incluso problemas de salud graves.
Como sabemos que hay poca información sobre este tema, hemos optado por presentarles, en el resto de este artículo, los más frecuentes y los más peligrosos.
1. Dormir
Tomar una siesta o irse a dormir inmediatamente después de comer puede causar serios trastornos digestivos.
Aunque es una actividad relajante y necesaria, es fundamental darse cuenta de que esta práctica incide directamente en el proceso digestivo.
Como el cuerpo está acostado, los jugos gástricos no cubren completamente la comida en el estómago. Así que no podemos aprovechar todos sus nutrientes.
Además, puede dañar nuestro esófago, ya que la naturaleza ácida de los jugos provoca reflujo y sensación de ardor.
2. Fumar
No es ningún secreto que fumar puede tener consecuencias muy graves en nuestra salud pulmonar y cardiovascular.
Los riesgos son aún más graves cuando las personas que fuman lo hacen inmediatamente después de una comida principal.
Esto se debe a la nicotina, que entra con el oxígeno necesario para el proceso digestivo. Este proceso facilita enormemente la absorción de carcinógenos.
3. Come fruta
Algunas personas pueden pensar que la fruta es una alternativa muy saludable para complementar las comidas principales del día, en lugar de la repostería dulce.
Son dulces, versátiles y pueden sustituir a los productos grasos tradicionales.
Sin embargo, lo que poca gente sabe es que lo mejor es consumirlos en ayunas, en ayunas o entre comidas.
Estos alimentos requieren ciertas enzimas para ser digeridos adecuadamente. Sus azúcares naturales también necesitan tiempo para ser absorbidos completamente por nuestro organismo.
Si el estómago no tiene que digerir otros alimentos al mismo tiempo, podrá aprovechar al máximo sus nutrientes, fibras y azúcares simples, que mejoran nuestra energía.
Por el contrario, si los ingerimos después de una comida copiosa, permanecerán mucho tiempo en el estómago y pueden provocarnos indigestiones, gases u otros trastornos estomacales e intestinales.
4. Dúchate
Si bien darse una buena ducha es relajante y nos permite potenciar nuestra salud circulatoria, no es recomendable hacerlo justo después de comer, ya que esta práctica puede debilitar mucho nuestro sistema digestivo.
En efecto, ducharse aumenta el riego sanguíneo en las manos y en los miembros inferiores del cuerpo, y por lo tanto reduce de facto el que circula en el estómago.
El órgano digestivo entonces tiene muchas más dificultades para funcionar correctamente, lo que puede causar dolor, inflamación y sensación de pesadez.
5. Bebe agua fría
Beber agua fría durante y después de las comidas puede causar una mala digestión de los alimentos.
Se podría pensar que este hábito favorece la deglución de los alimentos, pero dificulta la absorción de los nutrientes y la separación de los desechos.
6. Bebe té
Aunque el té es una bebida muy saludable, no es recomendable tomarlo después de las tres o cuatro comidas principales del día.
Este alimento interfiere en la absorción del hierro, debido a una sustancia llamada ácido tánico, que se fusiona con este mineral.
La absorción de hierro puede disminuir en un 87% debido al consumo de té, lo que puede provocar casos de anemia.
De hecho, este nutriente es esencial para la producción de glóbulos rojos en la sangre. Por lo tanto, una deficiencia de hierro conduce a síntomas como:
– Dolor de pecho
– Palidez de la piel
– Debilidad general y fatiga extrema
– Uñas quebradizas
– Falta de apetito
– Mala circulación en pies y manos.
7. Camina o corre
Es un error pensar que practicar actividad física después de comer es una buena idea para adelgazar o quemar más calorías.
Si bien correr y caminar son actividades innegablemente saludables, hacerlo justo después de consumir una comida abundante puede causar indigestión severa y molestias estomacales.
Por ello es recomendable no hacer ejercicio durante al menos 30 minutos después de una comida, y que la práctica no supere los 10 minutos.
¿Actualmente estás siguiendo algunos de estos malos hábitos? Si es así, ahora trate de prestar atención a sus prácticas, para mantenerse saludable.