Las propiedades medicinales de la achicoria.

Durante mucho tiempo un sustituto del café, a veces tiene mala prensa. Sin embargo, la raíz de la que está hecho tiene una gran riqueza nutricional y propiedades medicinales aún poco conocidas.
Una bebida y una ayuda para cocinar.
Los usos alimentarios se han diversificado a lo largo de los siglos. La harina de achicoria extraída de las raíces se utiliza para hacer galletas, bollería o pan, a los que da un bonito color. Tostada e infusionada, es fuente de una popular bebida caliente con buen sabor a avellana y caramelo, una alternativa sin cafeína que se puede disfrutar desde la mañana hasta la noche. La achicoria también puede dar a la cerveza un sutil color cobrizo y amplifica su amargor.
La achicoria es un alimento saludable
La achicoria lo tiene todo: alta en fibra y minerales, naturalmente libre de cafeína y baja en calorías. Además, estimula la flora intestinal, favorece la asimilación de calcio y hierro, asegura la digestión, fortalece las defensas naturales. También ayuda a reducir la ingesta de sal, ya que es un potenciador del sabor.
Efectos activos
La achicoria ahora se usa por sus azúcares, las inulinas, que promueven ciertas bacterias beneficiosas en el sistema digestivo en detrimento de otras, como los llamados yogures “active Bifidus”. Se trata de un azúcar llamado “prebiótico”, beneficioso para el tránsito intestinal y que protege frente a infecciones y alergias.
La achicoria también contiene moléculas antioxidantes que ayudan a proteger las células contra las reacciones de oxidación que aceleran el envejecimiento. Un proyecto, Oxychic, ha permitido estudiar y cuantificar los antioxidantes contenidos en diversas variedades de achicoria. ¡Demostró que un tazón de achicoria contiene tantos antioxidantes como un tazón de té verde! Realizado en asociación con empresas de semillas, el proyecto demostró que era posible aumentar los niveles en un 20% a corto plazo mediante cruces. Esta investigación podría permitir promover la achicoria y sus coproductos como ingredientes ricos en antioxidantes. Podría agregarse, por ejemplo, a la masa de pan para enriquecerla con antioxidantes o incluso usarse en productos de belleza.
Florencia Bayala