Los beneficios de los baños de barro para una relajación perfecta

Para aliviar dolores articulares, calmar quemaduras o incluso tratar problemas de la piel, solo hay una cosa: los baños de barro. Los lodos se han utilizado durante mucho tiempo para calmar muchas dolencias cotidianas ya sea en cataplasmas o en baños.
Los diferentes tipos de lodos y sus propiedades
Cada lodo tiene su propia composición y sus propiedades tienen efectos muy específicos en nuestro organismo. Hay tres tipos de barro que se utilizan para hacer una envoltura corporal:
– El barro negro del Mar Muerto: Este lugar es el más rico del mundo en cuanto a su concentración de sal. Gracias a la erosión de las montañas circundantes, este lodo también es muy rico en minerales. Tiene propiedades relajantes y regeneradoras. El lodo marino se utiliza de diversas formas en el cuerpo:
Como cataplasma: mezcla de lodo marino y agua de mar aplicada en diferentes partes o en todo el cuerpo. Las envolturas causan sudoración.
En un baño de barro: el cuerpo se sumerge en un baño de agua de mar calentada entre 38 y 42°C, mezclada con lodo marino.
Gracias a las propiedades de los lodos marinos, los tratamientos a base de este lodo pueden tratar el dolor articular. De hecho, el lodo marino tiene propiedades analgésicas.
– Fango de turba: es rico en fibras y minerales y por lo tanto tiene un poder antiinflamatorio. Se utiliza como relajante muscular.
– Lodos marinos: Formado a partir de plancton, sales minerales, algas y agua de mar, el lodo marino tiene un poder analgésico muy eficaz para aliviar el dolor asociado a la artrosis. De color negro por ser rico en sulfuros, el lodo marino es fácilmente reconocible por su olor ácido.
El barro, el remedio ideal para la fibromialgia
La fibromialgia es una enfermedad de los músculos que se manifiesta como dolor generalizado en todo el cuerpo y fatiga persistente. Simplemente calienta el barro a 45°C y colócalo sobre la zona de tu cuerpo a tratar durante 20 minutos. El calor aliviará el dolor muscular y lo hará retroceder a lo largo de las sesiones.
Una idea para un baño de barro en casa
Para hacer su propio baño de lodo en casa, llene una tina con agua caliente. Si lo desea, agregue unas gotas de aceites esenciales orgánicos o sales de baño al agua para darle fragancia. Cuando el tanque esté lleno de agua, agregue 2 tazas de lodo de turba u otro lodo de su elección. Rompa los grumos de lodo con las manos y agítelos. A medida que el barro se desvanece, tome una taza de agua tibia y colóquela al lado de la bañera. Métete lentamente en la bañera. Sumerge todo tu cuerpo, excepto la cabeza, en el agua fangosa. Deje en remojo por no más de 20 minutos, luego drene la tina. Enjuague en una ducha caliente. Después de secarse, acuéstese en un lugar cómodo durante al menos 30 minutos.
Yolanda Jakin